Tsukihiro Jibune - Ex-Guardian de la Oscuridad

Nombre
Tsukihiro Shirosaki Nakamura Jibune (Nombre Falso)

Apodo
Hiro, Tsuki, etc.

Edad
40 (19/06/1988)

Sexo
Masculino

Orientación Sexual
Heterosexual

Elemento
Oscuridad

Descripción física
Mide 1,93 cm; pesa 83 Kg y tiene una contextura musculosa pero no demasiado importante. Su cabello es de color naranja y bastante desordenado en general. Viste de muchas maneras, pero generalmente su color es el negro. Posee ojos marrones y un semblante calmo y serio.
Imagen

Descripción psicológica
Su psiquis es totalmente quebrada, pero es especialista en disfrazar sus emociones. Tiende a parecer “feliz”, aunque muy a su manera, para evitar preocupación a los demás. Aun así, siempre le importa proteger a cualquiera sin importar nada más. Tiene una mentalidad heroica, por así llamarla, pero lamentablemente esto mismo lo hace subestimarse con demasiadas cosas. Tiende a ser depresivo y hasta suicida en ocasiones, pero siempre logro conseguir como recuperarse.
Confía plenamente en aquellos a su alrededor y su vida es minúscula con la de los demás, y mas todavía con aquellos a quienes le importa.
En cuanto a su mentalidad en batalla, es extraña. Su meta en toda su vida es sobrevivir a cualquier costo y lograr su meta final, pero aun así; a menudo tiene demasiada confianza en su supervivencia; lo que igual lo fuerza a superar sus propios limites para llegar al máximo poder.

Historia
A la hora de nacer, estaba en una familia espiritista de poco nombre, pero con ciertos lazos no muy grandes con los Militares. Su madre era simplemente una Shaman de no mucho poder y su madre un Teniente Coronel; así que fácilmente veía mucho de el mundo. De niño lo empezaron a entrenar en las artes Shamanisticas, y como se esperaba, tenía una habilidad especial. Era capaz de soportar la posesión espiritual a un nivel increíble para su edad y entrenamiento. Por eso siempre fe forzado a mejorar este aspecto de su poder.
Lamentablemente, el niño solo lo veía como si fuera “retenido” por sus maestros y vivió odiando a todos. Quizá la única persona a quien quería seria su hermano mayor, quien a espaldas de todos le enseñaba algunas técnicas y por eso desarrollo una lazo muy especial con el. Pero aun así, odiaba a todos aquellos que los “retenían”.
Un día, a pesar de la normalidad, algo impensable sucedió. Un encapuchado, cuyas vestimentas eran completamente rojas, tenía unas cuchillas en sus manos que invocaban llamas y en instantes asesinaban a toda persona que se cruzaba. Todo era un infierno de muerte y fuego. Todo frente a unos ojos inocentes.
Aquel encapuchado, se dedico a perseguir al niño, como un juego sádico y terrible. Acabo con la vida de todo aquel que veía, hasta que el hermano de aquel niño se interpuso para protegerlo, sacrificando su propia vida. El lazo que compartían, forzó al hermano del niño a darle todo lo que le restaba de poder y vida, y termino sellándolo dentro de la mano derecha de aquel niño, que mas tarde descubriría que nació en ese instante.
El encapuchado no se detuvo allí. Continuó con la masacre hasta llegar a los padres del niño, acabando con sus vidas mientras trataban de proteger a su primogénito. Simplemente, aquel caballero de lamas y muerte, tomo del cuello al niño y lo alzo en el aire, marcando su ojo izquierdo y dándole un sufrimiento incontrolable, y una maldición eterna.
“…Ya eres libre, es hora que sepas la verdad de ti mismo, y de tu verdadero Padre…”
Con esas palabras, aquel encapuchado desapareció. Sin rastro alguno, y con las llamas destruyendo todo rastro de aquel hogar del niño.
Les tomo 3 días a la policía descubrir que había un niño vivo en aquellos escombros. No es sorpresa, aquel joven estaba catatónico y no se había movido en semanas. Simplemente paso varios meses en una cama de hospital, esperando a que fuera su momento de morir.
Sorprendentemente para si mismo, un caballero, rondando las tres décadas, con las palabras “Feliz Cumpleaños” y extendiendo la mano, lo llevo hasta su nuevo hogar. Aquel señor, tenía una sabiduría impresionante y aunque no era Shaman, fue capaz de entrenar un poco al niño. Este había recuperado la emoción, y ya era capaz de sonreír frente a toda ocasión.
Habiendo pasado dos años exactamente, la historia tan temida por el niño se repitió una última vez. El señor que había acogido al niño, aquel mentor y protector estaba muerto en su propia sala; y a su lado se hallaba aquel encapuchado de ropas carmesí. Esta vez, su cabeza estaba descubierta, tenía un semblante casi impecable para lo que acababa de cometer. Sus cabellos rojos y ojos azules destacaban, simplemente miró de nuevo a el niño, sonrió… Esa sonrisa algo enferma, sádica y cruel…. Se marco en la mente de aquel niño por toda su vida.
Esta vez fue capaz de reaccionar, e intentar atacar a su enemigo, pero fallando con facilidad. Aquel hombre carmesí, de un golpe lo inhabilito para luchar y lo dejo completamente fuera de combate.
“…Te siguen atando y yo te seguiré liberando. No te preocupes, yo siempre te estaré vigilando…”
Esas palabras tan repulsivas de un ser todavía mas repulsivo estaban enloqueciendo al niño. De nuevo, el encapuchado había desaparecido y el niño estaba apunto de quebrarse. Su debilidad lo había vuelto a dejar solo e incapaz de lograr nada. Estaba completamente solo… Y no era capaz de seguir avanzando.
Al menos eso creía. Le tomo menos de 3 meses encontrar una manera de conseguir poder, pero a un sacrificio importante. Se unió a las fuerzas Militares, y en cuestión de un año ya había conseguido un gran poder, pero aun se sentía insatisfecho. Trato de satisfacer su soledad y sufrimiento por poder, lo que lentamente lo convirtió en una maquina de luchar. Solo vivía para ser más fuerte y lograr vengarse. No tenía más porque vivir.
Pero como siempre, la historia le gusta cambiar su curso. Un día descubrió acerca de un grupo. Se hacían llamar “Los Shinigamis” y se dedicaban a cazar demonios y criaturas que peligraban el mundo. Su poder era muy alto y todos de ellos con un poder gigantesco, al menos según los rumores.
Le tomo un par de años, ya siendo un joven, lograr ser capaz de entrar a este grupo de selectos cazadores. Eran ocho cazadores, cada uno más único que el anterior, y un Líder capaz de hacerlo todo. Al lograr entrar, vio como el grupo le tomo si tiempo aceptar a su decimo miembro. Pero a el no le importo, venia por el poder y por nada mas.
En una misión, la que el mismísimo Líder dudo al aceptar, paso lo impensable. Aquel jefe pereció al proteger a nuestro joven protagonista. Su propia sed de poder, de pelea y su cinismo llevo a la muerte al Líder. Este sacrificio, cambio por completo al joven. Desde ese momento, juro no volver a preocuparse por si mismo, mientras exista alguien a quien proteger. Ese solo hecho cambio su vida y le dio una razón más para vivir.
En cuestión de años, era un grupo perfecto, y el joven tenia un poder tan grande que fue titulado “Shinigami Daiõ” por los rumores, aunque ya no le importaba. Una compañera de equipo, llamada Sakura Kagami, había logrado robarle hasta lo más profundo de su corazón. Realmente se amaban y el mundo no era capaz de contener tal felicidad mutua. Es más, en cuestión de años, un anillo marco su decisión de pasar el resto de su vida juntos, que quedo para toda la eternidad. El joven se sentía completo, había conseguido todo lo que deseaba. Era feliz. Realmente feliz.
“…La historia tiende a repetirse, ¿no lo crees?...”
Esas palabras repulsivas. Ese ser repulsivo. Esa idea repulsiva de arruinar la felicidad ajena. Aquel encapuchado, con su sonrisa sádica, había regresado.
Una misión, en un extraño templo alejado de cualquier lado, fue las circunstancias del final. Al entrar, los pasillos daban un aspecto único. Tétrico y a su vez imponente. Era de esperar que algo asi sucediera. Al llegar a una habitación, de la cual se erguía una gran escalera, frente a una puerta abierta, donde una luz cegadora salía, se encontraba aquel sujeto.
Algo despertó en el joven.
Algo oscuro.
Algo siniestro.
Algo… Terrible.
En un instante, una gigantesca aura negra salió de su ojo izquierdo, todo aquel poder despertó de tal manera que incluso sus compañeros fueron empujados por ese poder. El encapuchado sonrió, evitaba con gracia y facilidad los ataques el joven y lo llevo por le templo hasta alejarlo de su equipo. El joven, envuelto en su demencia de poder continúo peleando ciegamente, hasta que aquella frase resonó en su cabeza….
“…La historia tiende a repetirse, ¿no lo crees?...”
En ese instante, su rostro palideció, su mirada se lleno de pánico y de dolor. En un instante estaba de vuelta en aquella habitación en la que había enloquecido. Todos sus compañeros. Todos sus amigos. Todos ellos… Habían perecido en la batalla. Simplemente, con los ojos llenos de lágrimas, el corazón destrozado de sufrimiento y la voz, aullando al techo de dolor; abrazo a su amada mientras esta seguía con el ciclo vital. Y desaparecía de este mundo.
Meses mas tarde, llego a los Doce Mundos. Allí simplemente continúo su entrenamiento. De nuevo, vivía meramente para su venganza. Conoció a su espíritu, descubrió muchas cosas acerca de si mismo.
Lo que estaba en su ojo izquierdo había despertado, una criatura vil y completamente oscura, llamada Orihikutsu Nakamura. Al parecer no sabía como había sido sellado, pero simplemente lo estaba, y aquel despliegue de poder había sido obra suya, y de ahora en mas no se rendiría hasta ser libre; aunque sea acosta del joven. También, luego de la batalla, descubrió que en su mano derecha, poseía una segunda criatura.
Esta también acababa de despertar con aquel despliegue de emociones y poder, solo que se dedico a observar. Se llamo Kitsurogi Shirosaki, y aunque su vestimenta, cabellos y piel blanca; era una bestia oscura. Aclamaba que se convertiría en un Dios, y que mientras este atado a ese pedazo de carne seguiría con su cometido.
Con estas fuerzas en su cuerpo, busco sellos, técnicas y entrenamientos para evitar que sea completamente dominado; descubriendo las habilidades de su Espíritu; y una técnica única… El Kyokyokin.
Luego de regresar de aquellos Doce Mundos; continuo su entrenamiento, pero antes encontró a alguien en su camino. Se llamaba Shezcka Ven Dreshten; y era una persona como jamás había conocido. Vivió viajando con ella por siete meses; cada uno ahogando sus deseos y sufrimientos en el otro. Ninguno se quejaba, ambos sufrían pero no se creían capaces de cambiarlo, así que simplemente se apoyaron mutuamente. Cuando llego la hora de separarse, esta joven le revelo su verdadera identidad. Trabaja junto a aquel sujeto carmesí; y le dijo que si desea ser libre de él, lo primero que debe hacer es estar de su lado.
Entonces, aunque su sentimiento por la joven no era el más grande, se sintió traicionado y juro que ella lo pagaría; a lo que aquella dama simplemente tomo a gracia y desapareció.
El joven simplemente siguió viajando, hasta que un día conoció a Eriko Asakura. Sorprendido por aquella joven, descubrió el lugar que seria su ultimo hogar. La Shaman School.

Luego de la SS
Lamentablemente, al combatir con Massaki-ni, el no perdió sus poderes. El los perdió en un combate con aquel encapuchado carmesí. Pero aun así, conserva sus Alter Egos.
Luego de desaparecer un par de años, descubrió que tenia una hija; la cual se dedico a criar durante varios años.
Alrededor de esa época, encontró a su sucesor… Law…
Estaba creado a base de sus genes, así que era su hijo… Pero al igual que el, era un experimento militar. Era mucho más avanzado que el… Así que su misión era cuidarlo como su padre lo habia hecho con el…
Espíritu Acompañante
Jiback, Diosa de la Oscuridad y Espíritu Guardián de lo Oscuro en los 13 Mundos Espirituales.
Físico
Físicamente es algo alta y de contextura delgada. Tiene cabellos violetas de bastante desarreglados en general. Viste guantes de un violeta pálido; y su vestimenta de cuerpo es todavía más pálida. Tiende a parecer sádica a simple vista, pero solamente es una “cobertura”. Porta una guadaña de importante tamaño. Tiene una forma sellada que ya no utiliza, pero que es una pequeña bola rosada, con un gran rostro y pequeñas manos y pies. En esta forma no puede hablar en lo absoluto.
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Mental
Es bastante callada y le agrada espantar a los demás con su apariencia y actitud. De cierta manera se encariño con Hiro, debido a que el siempre estuvo a su lado y vice-versa. En general es tímida cuando no puede espantar a nadie simplemente se esconde de cualquiera. Es muy callada y solo habla lo justo y necesario. Es muy respetuosa con algunas personas y hasta ofensiva con otras; dependiendo de la primera impresión.
Historia
Ni ella misma sabe de su vida antes de ser espíritu, pero se cree que fue creada por un “Dios” en esperanza de proteger algo. Es uno de los Espíritus Guardianes de los Doce Mundos. Conoció a Tsukihiro cuando este llego a este mundo, aunque en ese entonces conservaba su forma “sellada”. Fue encomendada a Hiro en el momento que este llego a Los Doce Mundos, y recibió el titulo de Protector de Primas, el primer Mundo. Al encontrarse con este humano, creo un fuerte lazo que hasta hoy en día se mantiene.
A la hora de que Tsukihiro regresara a su mundo, aquel espíritu abandono los Doce Mundos y lo acompaño. Desde entonces están lado a lado y jamás se alejaron.
Hace cuestión de un par de años, logro conseguir su forma “humana” y sorprendió a varios con esta forma.
Poderes
Su especialidad es la capacidad de controlar su propio poder con absoluta maestría. Por eso hace un equipo perfecto con Hiro. Debido a la “maldición” de él, ella puede suprimir las fuerzas que intentan dominarlo y permitirle pelear al 100% y sin restricciones. Por eso a la hora de fusionarse no posesiona a su médium, sino que se convierte en un supresor de las energías “extras” en el cuerpo de Tsukihiro.

Arma
Porta una katana en la cintura, de mango blanco y guarda metálica color oro; redonda y con un extraño diseño; junto con una funda de esta color negra. Su hoja cambia de color dependiendo de quien la vea. Mas blanca acorde al Bien de cada uno, mas Oscura acorde al Mal. El usuario no puede ver su hoja en lo absoluto.
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Nivel
12
Estadísticas
Poder: 15
Furyoku: 25
Agilidad: 25
Resistencia: 10

Técnicas
Basicas

Fusión de Almas:

Posesión de Objetos:

Personales

Kyokyokin:

Ban San Kai:

Habilidades

• Toca la armónica.
  
• Sabe de Filosofía, y se llama “El ultimo Filosofo de la Oscuridad”
  
• Es capaz de entrenar por 37 hs consecutivas (su record)

Información Personal

Gustos

• No hay nada como la calma
  
• Tiende a divertirse en base a molestar con a los demás
  
• Ayudar a quien sea por lo que sea, aunque parezca enojado
  
• Fumar….
  Disgustos
  
• Kid
  
• Estar demasiado tiempo solo
  
• Pelear con quien sea…
  Costumbres
  
• Duerme demasiado poco, pero no le afecta
  
• Fuma por casi cualquier razón
  
• Con decir 3 oraciones puedes terminar pelando con el.

Datos Extra

Nombre
Orihikutsu Nakamura (Nombre Falso)

Apodo
---

Edad
8964 años. (06/06/6666 A.C.)

Sexo
Masculino

Orientacion Sexual
Asexual

Elemento
Oscuridad

Descripción Física
Kurogan Activo:
Su cuerpo físico al parecer esta hecho de poder espiritual puro. Es decir, prácticamente no es material. Le permite extenderse casi-infinitamente y moverse a gran velocidad. Mas allá de eso, cuando toma apariencia “humana”, tiene grandes ojos amarillos; el mismo color al que se torna el ojo de Tsukihiro a la hora de convertirse en Orihikutsu.
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Kurogan Sin Activar:
Tiene cabello largo negro y un par de ojos amarillos. Su brazo derecho aun esta consumido en su Furyoku, pero aun asi no tiene su poder. Su cuerpo esta cubierto por una armadura extraña, de color gris. Sus piernas, aun están cubiertas de su poder.
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Descripción Psicológica
Más allá de no considerarse humano, cree a toda la humanidad como una especie inferior. Aun así, es soberbio y se divierte observando a cada uno de ellos. Es de ceder su poder a Tsukihiro, solo por diversión y ver que es capaz de hacer con el propio “apoyo”.

Historia
Nació en este mundo aproximadamente el 7 de Julio del 666 A.C.
Desde entonces existen muchas historias de las cuales el clama haber sido participe. Por ejemplo, aclara que en una época, por el pavor de verlo presente, algún que otro humano se refirió a el como “Lucifer”. También dice que en casi toda religión, existe una historia que esta basada en algo que el realizo.
Mas allá de eso, al parecer proviene de algún lugar extraño, y una vez menciono ser parte del “Ejercito de Exterminación de los Seres Espirituales”. Lamentablemente, casi nada se sabe de el y será imposible saber mucho.
Luego de la muerte de “Los Shinigamis”, tomo presencia en Tsukihiro, meramente para experimentar. Clama que no sabe como ingreso al cuerpo, y que solamente no utiliza todo su poder para controlarlo, porque es más divertido esperar al momento correcto.

Al menos, eso solia ser asi…
Luego de perder sus poderes, mostro que en realidad era un humano, pero de una raza mucho mas antigua. Era el príncipe heredero al trono, pero jamás deseo un lugar asi. El simplemente deseaba ser libre…
Al poco tiempo, un Magus llego a sus tierras. Le ofreció libertad, a cambio de su alma. El muchacho no sabia que era este “precio” asi que acepto sin dudarlo. Su cuerpo se cubrió de oscuridad y su alma lentamente abandono su cuerpo. Antes de saberlo, no era mas un humano, y era esta criatura oscura…

Espíritu
Mismo que Tsukihiro

Nivel
12

Estadísticas
Poder: 15
Furyoku: 25
Agilidad: 25
Resistencia: 10

Arma
---

Técnicas

Kurogan:

Desgarre Universal:

Habilidades
---

Información Personal
Gustos
Le divierte observar muchas cosas, sobre todo a los Seres Vivos (Según el “Seres Espirituales”).
Disgustos
A pesar de todo, desprecia a la humanidad en general
Costumbres.
Tiende a burlarse y debatir con humanos, siempre con confianza y burla.


Datos extra
Su verdadero nombre, misión y pensamientos, son completamente difusos para cualquiera.

Nombre
Kitsurogi Shirosaki (Nombre Falso)

Apodo
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Edad
57 (15/10/1971)

Sexo
Masculino

Orientacion Sexual
Heterosexual

Elemento
Luz (Corrupta)
Oscuridad (Actual)

Espíritu
Mismo que Tsukihiro

Descripción Física
Su tez es completamente blanca, su cabello es blanco y extenso, sus ojos son amarillos; en general es prácticamente albino. Viste un pantalón estilo kimono blanco, sandalias de madera, medias negras y una especie de sobretodo blanco con el lado interior negro. Generalmente tiene en su mano una espada triangular sin mango ni guarda, con una cadena en el final del “mango”.
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Descripción Psicológica
Cabe destacar que su única meta es convertirse en un Dios. Para lograrlo, busca constantemente peleas y al asesinar a su oponente, tiende a “devorarlo”. Es bastante demente y “animalesco” en general. Pero cuando esta calmo, es mucho más serio y aparenta ocultar muchas cosas. Difícil saber esto último, ya que siempre está listo para combatir.

Historia
Es gran parte del espíritu del hermano de Tsukihiro, solo que lamentablemente se corrompió por la propia presión de los poderes dentro de él. Ahora mismo es simplemente un guerrero mas, listo para combatir y pelear con quien sea.
De a poco, perdió los recuerdos de su época como humano, y ahora solamente le resta pelear por lo que cree.

Nivel
12

Estadísticas
Poder: 15
Furyoku: 25
Agilidad: 25
Resistencia: 10

Arma
Es capaz de espadas triangulares y algo cortas. La hoja es alargada y se corta de manera triangular al llegar a la base, permitiendo que la hoja cubra parte del “mango”. En la base de este mango, siempre hay una cadena que se extiende por debajo de la manga de Kitsurogi, permitiéndole lanzarla. Es capaz de armar más de una de estas armas.
Sino, generalmente combate con cadenas. (PERDIDAS HASTA RECUPERAR SUS PODERES)

Técnicas

Hagane no Kensei:

Habilidades
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Información Personal
Gustos
Los combates
La comida en general
Disgustos
Que le demanden cosas o le digan que hacer y que no
Las personas como el, que viven por el poder
Costumbres
Devora tanto humanos como demonios que asesina.

Datos Extra
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