Primera vez*

"No quieres saberlo..." le dió otra vuelta con delicadeza y lentitud. La canción parecía estar llegando a su fin y los pasos de Frederick se volvía más lentos.

Entonces llegó a su cabeza el lugar de nacimiento de Ever, un lugar en el cual había estado mucho tiempo atrás.

- Gales... Donde nació el Rey Arturo... - Su interés por la lectura le hacia investigar muchas cosas que a los demás les parecian poco importantes o insignificantes.

Uno de sus temas favoritos, si no es que el más recurrente debido a su antigua búsqueda de un compañero fuerte, era la mitología. Había muchos mitos rodeando la vida del Rey Arturo y eso le fascinaba enormemente, lo cual externo con un ligero brillo en los ojos un poco distinto al anterior.

No se había dado cuenta que pensaba en voz alta al mencionar dicho dato. Se detuvo. sus ojos volvían a ver con la misma frivolidad de antes. Se alejo a un paso de la chica he hizo una reverencia.

- Mis disculpas, Ever, creo que estaba divagando. - Decía al volver a verle a los ojos. - ¿Desea continuar con el baile? - La canción había terminado y una nueva comenzaba a escucharse, el ofreció su mano inclinandose ligeramente hacia adelante.

Lo que fácil llega, fácil se va... por un momento creyó que podía seguir admirando su hermosa sonrisa pero ese deseo desapareció en el momento en que él volvió a demostrar su frivolidad. Bipolar, pensaría cualquier persona... pero ella creía que en el fondo si era alguien tierno, solo que esa fachada de Subdirector le hacía comportarse tal y como lo estaba haciendo.

- Tienes razón...- Dijo refiriéndose a lo del Rey Arturo.

Ella igualmente disfrutaba mucho de la lectura, pero había algunas que no prefería leer... como ello. Si podía elegir un país seguramente sería Rusia y su basto conocimiento, lo que más leía era el reinado de los Czares y la revolución rusa propiamente tal.

- No te disculpes, es lindo... te muestras como eres y si, me gustaría continuar si es que a ti no te molesta claro.- Dijo sonriente.

Sujeto su mano y nuevamente ambos comenzaron a bailar, esta vez la música era un poco mas triste que la anterior pero no por ello menos hermosa.

-Frederick...¿Como eras antes de llegar aquí?.- volvió a preguntar, en verdad quería saberlo. Pronunciar su nombre le era extraño, ella lo había autorizado a llamarla por su apodo y no le molestaba, pero él era diferente. En verdad le gustaría que fuera un poco mas abierto.